El 29 de septiembre del año de 1911, el arzobispo de Guadalajara don José de Jesús Ortiz, publicó el decreto por el que se aprueba la aparición de Jesucristo en el cielo de Ocotlán Jalisco.
El milagro de la aparición del Señor de la Misericordia ocurrió el domingo 3 de octubre de 1847, ante más de dos mil personas que se preparaban para la Santa Misa en el atrio de la capilla de la Purísima de Ocotlán.
Entre los años de 1847, 1848 y 1897 se levantaron decenas de informaciones testimoniales de las personas que presenciaron el prodigio, tanto ante la autoridad civil como a la jurisdicción eclesiástica, y después de más de 60 años, en septiembre de 1911 monseñor Ortiz, bajo su autoridad como representante de la Sede Apostólica hace anuncio en un edicto que “…No es posible la duda, y debemos reconocer como hecho histórico, perfectamente comprobado, la aparición de la bendita imagen de Jesucristo Crucificado, acaecida la mañana del 3 de octubre de 1847, en la villa de Ocotlán, sobre el fondo luminoso de una nube, situada al Noroeste de la Población”.
Y como prueba de gratitud ante dicho suceso el purpurado tapatío establece “…Y para que nunca se olvide la misericordia del Señor con aquel pueblo, queremos y mandamos que todos los fieles se congreguen en la forma que fuere posible, después de purificadas sus conciencias con los Santos sacramentos de la Penitencia y Sagrada Comunión, juren solemnemente en la presencia de Dios, por sí y sus descendientes, que año por año celebraran el aniversario del 3 de octubre, con el esplendor posible, y sobre todo, con misiones, acciones de gracias y actos de fe, de esperanza y de caridad, que serán la expresión de su reconocimiento a la multitud y grandeza de los favores recibidos”.
Cabe resaltar que el decreto por el que se comprueba el milagro de la aparición prodigiosa del Señor de la Misericordia fue firmada también por el canciller del arzobispado, el sacerdote San Justino Orona Madrigal, martir de la persecución catolica.
Esta aprobación eclesiástica dio pie a que en 1931 durante el pontificado del Papa Pio XI se agregara la devoción del Señor de la Misericordia a la cofradía del Santo Cristo de San Marcelo en Roma; en 1997 el Papa Juan Pablo II envío a la comunidad la bendición apostólica y su saludo con motivo del jubileo por los 150 años del Prodigio y al concluir el jubileo por los 175 años de la aparición, en 2022 el Papa Francisco envío su bendición apostolica a los fieles de la parroquia del Señor de la Misericordia.
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Prodigioso Señor de la Misericordia Ocotlán
Fuente: Chui Brambila / Ocotlán Desconocido